RONCESVALLES – ORREAGA – Historia, arte y excursiones

Nos situamos a casi mil metros de altura, en las inmediaciones de uno de los rincones más sugestivos de todo el Pirineo. En la cabecera del valle de Orreaga y abrigada por los bosques de los fríos vientos del norte que atraviesan la cordillera, nos recibe la colegiata de Roncesvalles. El paso del hombre y el devenir de la historia han ido cincelando su huella indeleble sobre los muros de este magnífico conjunto histórico-monumental que comenzó a cuajarse en la primera mitad del siglo XII, y que, a pesar de las vicisitudes por las que ha pasado a lo largo de los tiempos, ha conseguido perdurar hasta nuestros días.

Pero la biografía de estas tierras de paso empezó a escribirse miles de años atrás, cuando los primeros pastores del Pirineo comenzaron a subir sus ganados para que medraran durante el verano aprovechando los nutritivos pastos de altura. Así arrancaba una historia de humanos y de montañas, de civilizaciones que encontraron en estas imponentes lomadas el lugar idóneo para vencer a la infranqueable cordillera. (Irakurri +)

Solidaridad se escribe con “S” de SOS HIMALAYA

Sua edizioak me dijo hace más de un año la idea de hacer un libro sobre el Himalaya para conmemorar la muerte del alpinista navarro Iñaki Ochoa de Olza, que se quedó para siempre en las heladas laderas de la cara sur del Annapurna, expirando el 23 de mayo de 2008 por un edema que no pudo superar. En aquella ocasión se montó un dispositivo de rescate sin precedentes al que se sumaron alpinistas de muchas partes del mundo que hicieron lo imposible por llevar medicinas y oxígeno a donde se encontraba Iñaki. La ayuda finalmente no llegó. Los esfuerzos ímprobos de los amigos alpinistas que querían salvar la vida de Iñaki no dieron el resultado que todos hubiéramos querido. (Irakurri +)

En recuerdo al fotógrafo y escritor Pedro Zarrabeitia

Con motivo de la feria del libro que este fin de semana se va a celebrar en Getxo, la librería elkar va a habilitar un pequeño espacio literario en recuerdo al conocido escritor y fotógrafo getxotarra Pedro Zarrabeitia, quien falleció a principios de abril de forma inesperada.

Conocido por su larga, fecunda e importante trayectoria en el mundo de la fotografía artística –tenía en su haber importantes premios y fue el primer fotógrafo que expuso en el Museo de Bellas Artes de Bilbao– era autor de varios libros de fotografía, el último Los puentes de la ría de Bilbao, publicado junto con Argiñe Areitio en 2016, bajo el sello de la editorial Sua.

Pedro compartía su pasión por la fotografía con la escritura, donde también su legado literario ha sido importante. Autor de las novelas El Ciego de Olabe y Los Matagatos, su última obra se tituló Lobos de nuestro escudo, y fue publicada en otoño de 2017 por la editorial Txertoa.

En su importante contribución al arte y a la cultura vasca hay que añadir su interés por las estelas discoidales vascas, interés que nació de su afición a la etnografía.  En 2011 publicó  el libro Estelas Discoidales de Euskal Herria, extenso trabajo divulgativo sobre dichos monumentos funerarios vascos, publicado en 2011 por la editorial Pamiela.