“No quiero hablar de grandes batalllas, sino de la gente común” Toti Martínez de Lezea

Llanto en la tierra baldía, publicada también en euskera por la editorial Erein bajo el título Malkoak lur antzuan, es la nueva historia de la polífica y seguidísima autora Toti Martínez de Lezea. En esta ocasión, los lectores viajarán hasta el Badajoz de los años de la guerra civil y de la posguerra. 

Allí vive Damaso, un yuntero iletrado que intenta sacar adelante a su familia a base de trabajar en el campo y en el contrabando. Las circunstancias lo llevan a Badajoz capital cuando la ciudad es ocupada por los franquistas y en una sola noche matan a más de cuatro mil personas. Su mujer da a luz mientras él está ausente, y el cacique del pueblo le roba el hijo para dárselo al dueño de las tierras que quiere un heredero. Este es el punto de partida de una novela que transcurre también  en la zona minera de Bizkaia y en Etxebarri, donde tuvo lugar la huelga más larga de cuantas se llevaron a cabo durante el franquismo, y que terminó en un estado de excepción. 

Junto con Y todos callaron esta es la novela que más cerca de nuestra actualidad sitúa. Esta vez nos conduce de vuelta a unos años que fueron una auténtica olla a presión. 

Cierto, y que nuestros padres y abuelos vieron en toda su crudeza. Mi idea es continuar con esta serie que narra lo que se da por llamar la “pequeña historia”, es decir, no la de grandes batallas y personajes, sino la de la gente común que sufrió aquel drama y sus consecuencias. Tengo una edad y también memoria. 

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“Llanto en la tierra baldía” Toti Martinez de Lezea

NO QUIERO HABLAR DE GRANDES BATALLAS, SINO DE LA GENTE COMÚN”

Llanto en la tierra baldía, publicada también en euskera como Malkoak lur antzuan (Erein), es la nueva historia de la prolífica y seguidísima autora Toti Martínez de Lezea. En esta ocasión, los lectores viajarán hasta el Badajoz de los años de la guerra civil y de la posguerra. Allí vive Dámaso, un yuntero iletrado que intenta sacar adelante a su familia a base de trabajar en el campo y en el contrabando. Las circunstancias lo llevan a Badajoz capital cuando la ciudad es ocupada por los franquistas y en una sola noche matan a más de cuatro mil personas. Su mujer da a luz mientras él está ausente, y el cacique del pueblo le roba el hijo para dárselo al dueño de las tierras que quiere un heredero. Este es el punto de partida de una novela que transcurre también en la zona minera de Bizkaia y en Etxebarri, donde tuvo lugar la huelga más larga de cuantas se llevaron a cabo durante el franquismo, y que terminó en un estado de excepción.

 

 Junto con Y todos callaron esta es la novela que más cerca de nuestra actualidad sitúa. Esta vez nos conduce de vuelta a unos años que fueron una auténtica olla a presión.

Cierto, y que nuestros padres y abuelos vivieron en toda su crudeza. Mi idea es continuar con esta serie que narra lo que se da por llamar la “pequeña historia”, es decir no la de grandes batallas y personajes, sino la de la gente común que sufrió aquel drama y sus consecuencias. Tengo una edad y también memoria.

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