Javier Sierra: “La escritura tiene la facultad suprema de ayudarnos a pensar”

El exitoso escritor Javier Sierra (Teruel, 1971) tenía dos proyectos sobre la mesa cuando llegó la pandemia y sintió la necesidad de escribir sobre lo que estaba sucediendo. “En tiempos exigentes la novela debe ayudarnos a ordenar las ideas y proveernos de esperanza suficiente para afrontar los retos que se nos vienen encima”, asegura. De esa pulsión surge El mensaje de Pandora, una novela que bebe de los clásicos, publicada por Planeta.

La novela es una larga carta.
Sí, la dirige una tía a su sobrina de dieciocho años, y en ella le transmite una serie de descubrimientos que ha hecho sobre la última pandemia planetaria y su origen. La carta contiene recuerdos de viajes, dibujos y esquemas que descubren a la joven que lo que tiene entre manos es una especie de manual para alcanzar el futuro. El hallazgo la alcanza como un relámpago. (Irakurri +)

Fragmento de la novela “La librera y el ladrón” de Oliver Espinosa

Miré y vi una puerta abierta en el cielo, y la voz que yo había oído al principio […] me dijo: «Ven, sube y te mostraré las cosas que deben suceder».

Apocalipsis 4, 10

Madrid, 27 de julio de 2009

— ¿Que cuántos libros he robado? — Pol la miró con ojos de asombro, pero en realidad estaba aguantando la risa — . ¿Te parece una pregunta adecuada después de tanto tiempo?
— Sí, me parece adecuada. Solo te estoy preguntando por tu trabajo.
— Ah, no, no, no… Eso se ha terminado. He cambiado de vida.
— ¿Otra vez? — soltó ella sin poder reprimir una sonri-sa — . ¿Cuántas van ya? — Esta es la definitiva.A Laura se le heló la sonrisa y la embargó una profun-da tristeza. — De verdad — recalcó él.

Ella volvió a sonreír, pero en esta ocasión sin fuerzas.
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“El país escondido” Martin Abrisketa

El Bilbao de los años 80 es mi Bilbao”

Tras el éxito de La lengua de los secretos,  Martín Abrisketa (Bilbao,1967)  regresa a las librerías con El país escondido, una novela publicada por Planeta. La protagonista de esta nueva historia es Maggie, que pertrechada de una fantasía desbordante, tratará de localizar a su madre antes de que los servicios sociales la separen de su abuelo, con quien vive desde que su la madre la abandonara. Esa búsqueda llevará a Maggie, “inmersa en una burbuja de colores que la protege del exterior”, al Bilbao de plomo de los años 80.

¿Cómo se enfrenta el proceso de escribir una nueva novela tras un éxito como el que obtuvo con La lengua de los secretos?

Pues con un punto de inconsciencia, supongo. Porque si piensas en la cantidad de personas que van a leer lo que escribes, o que pueden leerte al menos, para mí hubiera sido imposible apretar una sola tecla de nuevo. Básicamente, comencé a escribir esta novela porque necesitaba contar una historia. Algo había ido tomando forma en mi cabeza y un día me di cuenta de que no podía seguir huyendo: tenía que volver a escribir. Fue una certeza traumática, porque suponía pasar por el trance otra vez. Escribir para mí es una aventura maravillosa, sí, pero muy dura.

 

El país escondido transcurre en el Bilbao de los años 80. ¿Por qué esa época? ¿Se ha nutrido de sus propios recuerdos?

Sí, claro, me he nutrido de mis recuerdos para recrear el escenario. El Bilbao de los 80 es mi Bilbao, el Bilbao en el que crecí. Un lugar donde podía ocurrir cualquier cosa: lo mejor, lo peor y hasta lo imposible. Desde que el Athletic ganara dos ligas consecutivas, hasta que cayera el diluvio universal en plena Aste Nagusia; unas inundaciones catastróficas que abocaron a la ciudad a reinventarse. Elegí este escenario porque a menudo sueño con él. Me encanta. Fuera como fuera (gris, sucio, violento, lleno de barricadas, yonquis y sin perspectiva alguna de futuro debido a la reconversión industrial), me encanta aquel Bilbao, y más conforme pasan los años y lo miro con distancia.

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María Dueñas: “Esta novela es un homenaje a todos aquellos valientes que vivieron el trance de tener que abandonar su tierra y emigrar”

Maria DueñasLa escritora María Dueñas ha centrado su nueva novela en la colonia española del Nueva York de los años 30. Las hijas del Capitán bucea en el fenómeno de la emigración, el desarraigo y la lucha por salir adelante en la capital del mundo.

En Las hijas del Capitán viajamos hasta el Nueva York de los años treinta, ¿qué te llevó a elegir esta época y esta ciudad para tu nuevo libro?

El arranque fue descubrir que allí existió una interesante colonia de inmigrantes españoles en las primeras décadas del XX. Sin llegar a ser tan numerosos como otras nacionalidades –italianos, alemanes, rusos o irlandeses, por ejemplo—, con su esfuerzo y su tesón también contribuyeron a hacer crecer la ciudad y el país. Se agruparon en barrios concretos, abrieron abundantes negocios, establecieron asociaciones… Vivieron a caballo entre dos mundos, esforzándose por asimilarse al nuevo sin dejar jamás de sentir una nostalgia terrible por lo que dejaron atrás. (Irakurri +)